El curtido

Principal ingrediente de su éxito, la piel representa para Poltrona Frau materia de proyecto, símbolo de elegancia, prestigio y calidad. Pelle Frau® tiene su origen en una atenta selección de pieles bovinas de proveniencia, fundamentalmente, europea. Cada manto es un subproducto de la cadena alimentaria, un residuo que se optimiza en la fase de curtido para convertirlo en un material noble y de valor.
Pelle Frau® es siempre plena flor, la capa más valiosa y resistente de la dermis bovina.

El proceso de curtido

Comienza tu viaje por el proceso de curtido. Descubre cómo nace Pelle Frau®.

Curtido

Antes de sumergir los mantos bovinos en los bombos de curtido, se preparan con algunas fases previas que sirven para «desnudar» la piel para, así, poder iniciar el proceso de selección de los mantos y de la capa superior de la dermis que, en el caso de Pelle Frau®, es siempre «plena flor».
Remojo, calero, descarnado y dividido permiten al manto acoger los materiales de curtido perfectamente, esta combinación de acciones químicas y mecánicas estabiliza orgánicamente la piel.

Recurtido

Tras una cuidada selección de Pelle Frau®, en nombre de la sostenibilidad y del menor impacto ambiental posible, es el momento del recurtido. De la combinación de acciones químicas y mecánicas consagradas a definir el tipo de artículo se determinan los aspectos finales de la Pelle Frau®: textura, tacto, estructura, cuerpo, grano y brillo.

Los mantos se tiñen con anilina mediante inmersión y a través de la acción mecánica del bombo. Durante más de veinte años, Poltrona Frau® ha ido cambiando los procesos de acabado a base de disolventes por tratamientos a base de agua. Para dar mayor elasticidad, suavidad y resistencia a tirones las pieles se engrasan. El ablandado ablanda y suaviza la textura de la Pelle Frau® y hace que el grano de la superficie sea más o menos visible. Presecado y secado eliminan la humedad de la piel, el secado completa el proceso y con el acondicionado se suaviza y rehidrata la Pelle Frau® para darle su tacto característico.

Acabado

El proceso de acabado se refiere a la combinación de acciones químicas y mecánicas para uniformar el color y proteger la capa superficial. Esta fase afecta solo a las pieles pigmentadas y semianilinas y está consagrada a mejorar su desempeño técnico y su aspecto final. La protección aplicada mediante rociado o a mano puede tener diversas composiciones: pigmentada, transparente, con aceites y ceras, cada una de ellas le otorga un aspecto estético especial a cada una de las colecciones.