Sobria y refinada, la mesa Kyoto, diseñada por el arquitecto y diseñador Gianfranco Frattini, es la expresión perfecta del encuentro entre visión de proyecto y maestría en la ejecución. A comienzos de los años 70, durante un viaje a Japón para estudiar la obra de los maestros locales, Gianfranco Frattini visita los talleres artesanos de Kioto junto al maestro ebanista Pierluigi Ghianda, que se convertirá en su amigo y colaborador. Inspirándose en las técnicas de elaboración y en la estética del lugar, el diseñador concibe el encastre como origen de la mesa con el nombre de la ciudad, que entrará en producción en 1974. Kyoto se convierte inmediatamente en un ejemplo de una sobriedad que, como en la mejor tradición del diseño italiano, une a la maestría de la idea una ejecución impecable. En la mesa Kyoto, el concepto constructivo se convierte en el propio objeto. La ausencia de elementos decorativos realza la belleza de la materia prima —los insertos de nogal Canaletto tienen una clara función de refuerzo— requiriendo una gran habilidad y cuidado en la realización, y un profundo conocimiento de la propia materia. Reeditada por Poltrona Frau respetando totalmente el proyecto original, Kyoto refleja la competencia y la capacidad de una nueva generación de artesanos, herederos de la valiosa tradición italiana en la elaboración de la madera, y se une a Albero y Turner como ejemplo de alta carpintería.
Su acabado en negro, recuperado también de la versión original que Frattini proyectó junto al ebanista, se obtiene de un barnizado negro a poro abierto aplicado sobre la estructura de madera maciza de haya.
En esta peculiar versión, para mantener el efecto gráfico y mecánico al mismo tiempo de la unión de las patas dentro de las rejillas, Frattini decide colorear la parte superior de las patas con un lacado en rojo brillante. Un homenaje a la cultura japonesa que ha sido la fuente de inspiración del proyecto. Mediante este recurso la posición de las patas será siempre visible por el contraste cromático en la superficie de la mesa, añadiendo una señal distintiva más.
La mesa Kyoto forma parte de la colección permanente del Museo de Diseño de la Trienal de Milán.